lunes, 25 de octubre de 2010

Mejores precios contrarrestan menor volumen exportado

Las exportaciones pesqueras peruanas generaron en agosto pasado USD 236,9 millones en ingresos, un 17% más que en el mismo mes de 2009, cuando su valor fue de USD 202,4 millones. No obstante, el volumen exportado descendió un 24,9%, a 161.000 toneladas, informó el Ministerio de la Producción (Produce).
Esta baja se debió principalmente a las menores ventas de productos enlatados, congelados, harina y aceite crudo, que disminuyeron en 42,8%, 99,5%, 8,7% y 56,4%, respectivamente.
Según indica el último Boletín Estadístico elaborado por el Produce, entre enero y agosto de 2010 la venta al exterior de 1.259.400 toneladas generó USD 1.877,6 millones; mientras que en el mismo lapso del año anterior se exportaron 1.801.900 toneladas por USD 1.687,2 millones.
En tanto, en agosto de 2010 se exportaron 119.500 toneladas de harina de pescado, mientras que en el mismo mes del año pasado se habían enviado al exterior 130.900 toneladas (8,8% menos).
Con respecto al valor, en el octavo mes de este año se exportó harina por USD 173,6 millones, es decir, un 36,6% más que en agosto de 2009, cuando la cifra totalizó USD 127 millones.
Entre enero y agosto de 2010 se exportaron 844.100 toneladas de harina de pescado, un 34,8% menos que en el mismo lapso de 2009 (1.295.000 toneladas).
Los principales mercados de la harina peruana fueron China, Alemania, Japón, Vietnam, Reino Unido, Chile, Taiwán, Turquía y Australia, que compraron cerca del 94,3% del total comercializado hasta agosto de 2010.
Las exportaciones de agosto elevaron las ventas al exterior de harina de pescado de los primeros ocho meses a USD 1.261,3millones, un 10,8% más que en el mismo lapso de 2009 (USD 1.137,9 millones).
En tanto, las exportaciones de aceite crudo totalizaron en agosto último 22.300 toneladas por USD 20,3 millones, es decir, un 40,2% más que en agosto de 2009 (USD 33,9 millones).
Considerando los primeros ocho meses de 2010, se vendieron al exterior un total de 166.600 toneladas de aceite, un 22% menos que en el mismo período del año anterior (213.500 toneladas).
Bélgica, Chile, Canadá, China, Noruega, Dinamarca, Australia, Japón y Estados Unidos absorbieron el 93,2% de las exportaciones de aceite de pescado registradas hasta agosto último.
Estas ventas generaron USD 164,8 millones, monto que representa una suba del 9,1% con respecto al mismo período de 2009 (USD 151,1 millones).
También se exportaron en agosto de 2010 unas 13.500 toneladas de productos congelados, volumen que da cuenta de un descenso del 50% frente a 27.000 toneladas exportadas un año antes.
En los primeros ocho meses de este año se vendieron al exterior 195.500 toneladas de productos congelados, un 19% menos que en similar lapso de 2009 (241.200 toneladas).

Fuente:


La acuicultura chilena atrae a inversores peruanos

El titular de la Subsecretaría de Pesca (Subpesca) de Chile, Pablo Galilea, anunció que grandes compañías pesqueras peruanas están interesadas en invertir en la acuicultura chilena.
"El futuro del mar está en la acuicultura por eso vemos con muy buenos ojos que exista el interés de más empresas peruanas por ingresar a esta actividad en Chile y lo harían en el norte del país”, dijo el subsecretario.
Además, recordó que del total de los productos pesqueros exportados por Chile en 2009, el 60% fueron de la acuicultura y el 40% restante de la pesca extractiva.
"El futuro de la acuicultura está en el océano Pacífico, lo que pone en una situación ventajosa a Perú y a Chile", destacó Galilea, informó la agencia Andina.
El subsecretario dijo que pretenden crear condiciones adecuadas para que inversionistas peruanos puedan desarrollar la acuicultura en el norte de Chile. "Además, existen todas las facilidades para que se establezcan estos capitales, pero siempre teniendo mucho cuidado por el medioambiente", desatacó.
Mientras tanto, la firma peruana Tecnológica de Alimentos (TASA) evalúa adquirir una planta de salmón en territorio chileno.
Esta compañía es el mayor productor de harina de pescado del mundo. Posee alrededor de 16 plantas de procesamiento en Perú y una flota de 86 embarcaciones.
Por último, Galilea aseguró que las relaciones pesqueras bilaterales se han fortalecido y que existe una buena disposición de ambas partes para tomar medidas que permitan la conservación de especies marinas en conjunto.
"Hemos conversado con el ministro de la Producción, Jorge Villasante, para realizar una reunión entre los sectores público y privado de Chile y Perú y lograr así un mejor desarrollo de nuestra pesquería que es compartida, como la anchoveta y el jurel”, concluyó.

fuente: http://fis.com/fis/worldnews/worldnews.asp?monthyear=10-2010&day=25&id=38809&l=s&country=0&special=&ndb=1&df=0

La Armada de Estados Unidos prueba combustibles de algas

La Armada de Estados Unidos realizó por primera vez una exhibición de la potencia que puede desarrollar un barco alimentado con un combustible alternativo, en aguas de las costas de la Base de Norfolk, Virginia. Los barcos de la Armada utilizan 80.000 barriles de petróleo por día y el secretario esta Fuerza, Ray Mabus, pretende que durante la próxima década la mitad del consumo total de energía provenga de fuentes alternativas (incluyendo biocombustibles y energía nuclear).
La Armada de EE.UU. tiene como objetivo establecer un Grupo Ecológico de Ataque (Green Strike Group) para operaciones locales en 2012 y desplegar en 2016 un Grupo de Ataque integrado totalmente de barcos impulsados por energía alternativa.
El Riverine Command Boat (RCB-X), un barco de 49 metros de eslora, fue diseñado para llevar a cabo operaciones costeras y en aguas interiores y utiliza combustible 50% a base de algas y 50% NATO F-76. La embarcación alcanzó una velocidad que superó los 44 nudos.
El Riverine fue sometido a una serie de maniobras. Es la primera vez en que un barco de superficie de la Marina alimentado por biocombustible navega a toda máquina. Y según informó The Virginian-Pilot, la demostración fue un éxito.
“Operar en forma ecológica implica combatir las capacidades y asegurar la movilidad de la Marina”, dijo el contraalmirante Philip Cullom, director de la División de Operaciones Marinas de Energía y Disposición Ambiental, que lidera la Fuerza de Tareas de Energía de la Marina.
“No se trata sólo de la seguridad natural, también fortalece la seguridad nacional. Al contar con una fuente de energía alternativa abundante y confiable, ya no quedaremos supeditados a una fuente única de energía, como el petróleo”, destacó.
“Primero y principal, la conservación de la energía amplía el rango táctico de nuestras fuerzas y conserva los preciados recursos energéticos. Nuestro objetivo, como fuerza Naval, es ser los primeros en adoptar tecnologías nuevas que mejoren la seguridad nacional de una manera sustentable para el medioambiente”, afirmó Cullom.
El combustible alternativo es conocido como "HR-D" o diésel hidro-procesado renovable.
A diferencia del biocombustible, no contiene agua, un elemento incompatible para los sistemas de combustible navales, y no tiene la vida útil limitada de los combustibles, que suele ser de seis meses.
Como se trata de un mercado en desarrollo, el combustible a base de algas es caro comparado con el petróleo. Pero el contraalmirante Cullom confía en que al aumentar demanda de esos productos, el programa de la Marina ayudará a que más adelante disminuyan los precios.
El Riverine se empleó para patrullar los ríos durante la Guerra con Iraq. En aguas costeras, se desplaza a una velocidad de 40 nudos.

Fuente:
http://fis.com/fis/worldnews/worldnews.asp?monthyear=&day=26&id=38837&l=s&special=&ndb=1 target=

La segunda ola (movidas en el sector pesquero)

La fuerte alza que experimentó el precio de la anchoveta en los últimos años ha llevado a los principales grupos pesqueros a salir nuevamente de compras. Todos quieren crecer y seguir captando una mayor cuota.
En diciembre del 2009, Luis Falcone, gerente general de Pesquera Centinela, llegó a un acuerdo con la familia Dyer para hacerse de dos plantas que le pertenecían a Corporación Pesquera Inca (Copeínca). La operación no solo reveló que los socios del grupo Romero están decididos a convertirse en un jugador de peso en el negocio pesquero, sino que activó la segunda fase de la ola de compras de plantas y embarcaciones, cuya primera fase se inició en el 2006 y que culminó dos años después con la consolidación de ocho grandes grupos pesqueros.
Aquella no sería la única transacción que realizaría la dupla Romero-Falcone. En junio del 2010 esta volvió a la carga y, tras desembolsar US$12 millones, invirtió US$3 millones más en la compra de Pelagic Investment Group. No contentos con ello, tres meses después desembolsaron US$45 millones para comprar el 100% de las acciones de Inversiones Alamare.
Luego de esas operaciones vinieron otras de similar envergadura, en las que los protagonistas fueron los grupos que no tuvieron una participación tan activa en la ola anterior: la familia Matta y su brazo pesquero Exalmar adquirió tres empresas por US$23,9 millones y Diamante (con el respaldo de la gestora de fondos Enfoca) cerró la compra de Inversiones Gamarra por US$14 millones.
En los últimos meses, dos grandes del sector también dieron algunas sorpresas. China Fishery Group compró Pesquera Alejandría por US$95 millones, y los Brescia, a través de Tecnológica de Alimentos (TASA), pagaron US$50 millones por cinco embarcaciones.
CAUSA Y EFECTO
¿Pero qué desató esta fiebre de compras y ventas? Sin duda, el disparador fue la fuerte alza que experimentó el precio de la anchoveta (materia prima de la harina), cuya tonelada pasó de cotizarse en US$120 en el 2008 a picos de hasta US$300 en la primera temporada de pesca del 2010. “La entrada en vigencia del sistema de cuotas individuales de pesca hizo que los armadores (que no suelen tener plantas y venden su pescado a terceros) mejoraran su capacidad de negociación frente a los industriales y que, en consecuencia, el precio de la materia prima subiera en forma significativa. La compra a independientes dejó de ser rentable y muchos concluyeron que, para no perder, el mejor camino era comprar cuota”, precisa Mauricio Olaya, socio de Estudio Muñiz y asesor de algunas de las transacciones que se realizaron el último año.
No se equivoca. Humberto Speziani, asesor de alta dirección de TASA, agrega “todo el mundo está buscando mejorar sus posición porque los precios han alcanzado picos irracionales. Si hoy le compras pescado a terceros para producir más harina,prácticamente te quedas sin utilidad”.

Y no bromea. Según Fernando Parodi, gerente general de Pesquera Hayduk, si un industrial sale a pescar con su flota propia gasta alrededor de US$80 por TM de anchoveta, mientras que se si opta por comprarle a un armador deberá desembolsar aproximadamente US$300 por tonelada. “Basta hacer una simple suma para comprobar que esas compras no son nada rentables”, dijo. Los industriales tienen flota propia, pero requieren comprar materia prima a los armadores y ‘vikingos’ (que tienen en conjunto aproximadamente un 32% de la cuota global de pesca) para utilizar toda la infraestructura que adquirieron tras la primera ola de compras y ventas y así reducir costos.
SED DE EXPANSIÓN
Otro factor que aceleró la segunda ola de compras es la sed de crecimiento que tienen algunas familias, en especial las que hasta hace un año atrás ocupaban los últimos lugares en el ránking de los ocho grupos pesqueros más importantes del país. Total, recursos para seguir creciendo tenían, pues el precio de la harina de pescado pasó de cotizarse en US$900 la tonelada en el 2008 a rozar los US$1.950 a inicios del 2010.
En ese sentido,Andrés Muñoz, vicepresidente de banca comercial del Interbank, precisa que en los últimos años la situación financiera de la mayoría de pesqueras ha evolucionado en forma muy positiva. “El sector se ha visto favorecido por dos factores: la implementación del sistema de cuotas, que le trajo estabilidad, y el alza del precio de la harina, que le permitió acumular importantes ingresos. Estos fueron utilizados en la compra de barcos y cuota de pesca de todo aquel dispuesto a vender”, refirió el ejecutivo.
Han transcurrido diez meses desde que se activó la segunda fase de compras y ventas, pero ya se pueden ver algunos reacomodos en el sector. China Fishery Group, que a inicios del 2009 tenía una participación de 4,83% en la cuota global de la pesca de la parte centro-norte del país, hoy cuenta con una participación de 6,05%, gracias a la cual logró superar a Exalmar y situarse muy cerca de Hayduk. La dupla Falcone Romero también creció 0,65% y hoy concentra el 2,19% de la cuota que asigna el Ministerio de la Producción. Y salvo Copeínca, Austral y la pesquera de las familia Baraka – Martínez, los demás grupos también crecieron. La familia Matta aumentó su participación en 0,36%, mientras que Diamante lo hizo en 0,48%.
LO QUE VIENE
¿Y ahora qué puede esperarse? Gerardo Gonzales, presidente de la Asociación de Armadores Pesqueros del Perú, señala que aún habrá armadores independientes (pequeños y medianos ) que continuarán vendiendo su cuota porque temen que si no lo hacen ahora, la bonanza (generada por los altos precios de la materia prima) que hoy los acompaña se acabe en el corto plazo. Sin embargo, añade que habrá otro grupo –que él encabeza– que se mantendrá en el negocio, pues sabe que los industriales seguirán comprando, pues necesitan producir más harina para aprovechar los altos precios del mercado internacional.
Los protagonistas de la nueva ola evitan hablar para no revelar sus próximos pasos a su competencia. No obstante, si algo está claro es que todo el mundo continúa trabajando para seguir aumentando su participación en la pesca. La familia Matta tiene previsto listar a Exalmar en la Bolsa de Valores de Lima para incorporar nuevos socios (ya realizó un ‘roadshow’ internacional) y financiar las compras que viene negociando. Algo similar vendría haciendo Diamante que, gracias al respaldo financiero de Enfoca, estaría a punto de dar una sorpresa. Todo indica que el grupo Romero no se quedará atrás. Fernando Pozada, su socio en Centinela, revela que la meta es capturar el 5% de la cuota global de anchoveta.
Olaya, del Estudio Muñiz, y Muñoz, del Interbank, coinciden en que la nueva ola de compras podría ser relativamente larga, porque muchas compañías pequeñas se resisten a vender y porque la disputa esta vez es barco por barco y punto por punto de la cuota asignada a los armadores, los cuales aún tienen en sus manos el 12% de la cuota global de pesca. Por lo visto, el mar seguirá movido.
MONTOS Y TIPO DE ENDEUDAMIENTO
Diferencias entre la nueva y la vieja ola

Según Andrés Muñoz, vicepresidente de banca comercial del Interbank, dos cosas diferencian a la segunda ola de compras del proceso anterior. “Antes las compras solo se financiaban con deudas; ahora estas se realizan con un mix compuesto por préstamos bancarios y recursos propios. Y es que, si bien la mayoría cuenta con recursos, no es bueno quedarse sin liquidez”, dice. Además, añade Jaime Espinoza, gerente de finanzas corporativas del Banco de Crédito del Perú ,“otra cosa importante que se puede observar es que, como se tratan de operaciones relativamente medianas (rara vez superan los US$50 millones) son financiadas para ser pagadas en un plazo de entre cinco y siete años”. Prácticamente nadie está tomando deuda de largo plazo. Otro aspecto a considerar, anota Mauricio Olaya, del Estudio Muñiz, es que antes un grande compraba a otro grande, pero ahora las transacciones involucran a pequeños y medianos.