Los últimos estudios realizados en el mar peruano determinaron que la presencia de aguas frías, favorables para el éxito de la reproducción de la anchoveta, generará mayor producción en el corto plazo, informó el Ministerio de la Producción.
Pero, por el momento, estas variaciones de temperatura del mar ocasionaron una redistribución de los cardúmenes del recurso y una mayor concentración de juveniles, por lo que no será posible levantar la veda para la pesca industrial de la anchoveta.
Así lo indican los resultados de la operación Eureka, realizada los días 16 y 17 de diciembre con el propósito de obtener información científica sobre el estado real de la anchoveta (Engraulis ringens) y sus áreas de distribución.
En las últimas cuatro semanas, “la temperatura en el mar peruano ha pasado de condiciones frías en la quincena de noviembre, a casi normales los primeros días de diciembre. Hacia mediados del mes las aguas estaban enfriándose otra vez. Estas variaciones han causado una redistribución de los cardúmenes de anchoveta trayendo consigo una alta presencia de juveniles”, explicó el ministro de la Producción, Jorge Villasante.
Estas variaciones climáticas se deben al fenómeno de “La Niña”, un hecho que no ocurría desde la temporada 2001 y 2002. Antes, se habían presentados estas condiciones ambientales entre 1992 y 1994.
Según los datos obtenidos de la operación Eureka, la anchoveta en estado juvenil está distribuida a lo largo de toda la Región norte-centro con tamaños de 3, 5, 7 y 9 centímetros de longitud total, motivo por el cual no se puede levantar la veda.
La suspensión de las actividades extractivas comenzó a regir el 20 de diciembre en el área comprendida en la Región norte-centro del litoral y se prolongará por un periodo de 21 días.
"Luego del inicio de la segunda temporada de pesca el pasado 20 de noviembre, se han establecido tres vedas de manera casi consecutiva, porque la variabilidad de las condiciones oceanográficas ha traído una alta incidencia de juveniles de anchoveta en el mar", recalcó Villasante.
La expedición también detectó una presencia de jurel y caballa en porcentajes mayores a los encontrados en la primavera de 2009.
De acuerdo al informe del Instituto del Mar del Perú (Imarpe), se capturaron 985 toneladas de pescado durante los días que duró la expedición. De este volumen, un 62,6% fue de anchoveta, un 20,8% de jurel y un 13,5%, de caballa.
En el estudio participaron 31 embarcaciones con permiso de pesca vigente para la extracción de anchoveta y con Límite máximo de Captura por Embarcación (LMCE), asignado para la zona norte-centro.
El Ministerio informó que la operación se repetirá los días 5 y 6 de enero de 2011, a fin de determinar las zonas de menor presencia de esta especie.
Fuente: http://fis.com/fis/worldnews/worldnews.asp?monthyear=&day=22&id=39843&l=s&special=&ndb=1 target=
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